NOTICIAS

Información actual

domingo, 12 de mayo de 2013

CUANDO EL ESTRUENDO DE LA CULTURA NOS VUELVE MUDOS

 Por: José Chacchi Paniagua

Sección: Cultura


Cuando Víctor Hugo hablaba de arte lo vinculaba mucho con el color azul, lo mismo, más adelante, lo hicieron los modernistas con la emblemática figura de Rubén Darío que publicó un libro con el mismo nombre del dicho color que será iniciadora de la primera corriente literaria latinoamericana. Desde ahí y antes de ello, siempre muchos escritores, pintores, psicólogos, etc. quisieron definir qué era el arte algunos coincidiendo, algunos alejándose. Quizás será en la etapa de la vanguardia cuando el arte toma un carácter distinto, un carácter experimental y hasta la fecha de hoy la gente siempre busca realizar lo diferente, lo rebelde, lo inusitado.
En el caso peruano, quizás uno de los poetas más reconocidos y para muchos, uno de los mejores, fue César Vallejo, poeta norteño que con su libro Trilce consigue lo que ya muchos buscaban: dominar el lenguaje y volverlo suyo. De uno de sus versos de este autor, de uno de los poemas dedicados al erotismo y al deseo de la amada que se siente más en la cárcel saldrá el nombre de este colectivo cultural denominado Estruendo mudo. Este colectivo cultural se presentó este último viernes diez de mayo en el Centro Cultural de España demostrando así su amor por el arte y este carácter rebelde que suscita. Estruendo mudo se originó en San Juan de Lurigancho, específicamente, en Mangomarca y desde es el primer día, Alfonso Bocanegra, director del colectivo, tenía en mente cómo desarrollar este arte y difundirlo por diversos espacios. El día viernes se hizo gala de diversos artistas ya que fue una presentación abierta a promediados de las siete de la noche. Cuando comenzó a presentarse Estruendo mudo con el sonido de tambores y danzas la gente comenzó a darse cuenta que del arte sí se puede ser feliz. Cuando veíamos como los niños, con un amor genuino, tocaban tambores y cantaban y conocían a Vallejo, la gente se sorprendía.
"Será que el arte nace con uno mismo o lo va descubriendo con el pasar de los años, pero cuando a uno lo toca, es imposible zafarse de él" así lo comenta Alfonso y con una luz en sus ojos que nos demuestra cuánto amor tiene por este colectivo y, sobre todo, por la cultura. Nos contaba de todo aquello que tuvo que pasar para poder avanzar con este colectivo "había días que no teníamos de dónde comer y cantábamos en las calles" Este pasaje de la historia me hace recordar al famosísimo cuento "El rey burgués" de Rubén Darío en el cual a un artista lo matan de hambre. Pero ellos no han muerto, bueno sí, sí murieron para el mundo cuadriculado, esquematizado, para ese mundo de sanchos, de conformistas; en cambio, ellos nacieron como quijotes que buscan a su Dulcinea, que se enfrentan contra esos gigantes que son la posmodernidad que aturde mentes, que se inmolan por el arte, por la cultura y por conseguir, en sus propias palabras "un Perú más culturoso". 


No hay comentarios:

Publicar un comentario

 

ULTIMAS NOVEDADES

Información actualizada

ACTUALIDAD

Sociedad

PERIODISMO

Investigación